A la mayoría de las Orquídeas les gustan el sol directo en otoño e invierno, pero no en primavera y verano, o sólo un poco por la mañana o por la tarde. Algunos géneros como Phalaenopsis, Paphiopedilum, Phragmipedium, etc. tienen menos necesidades de luz y sólo admiten los rayos del sol durante el invierno y el resto del año luz muy filtrada. |